El té verde es una de las bebidas más populares del mundo, pero ¿es siempre verde? La respuesta es no. Si bien el té verde es el tipo de té más común, en realidad existen muchos tipos diferentes de té que se pueden preparar a partir de la misma planta. Dependiendo del tipo de té, las hojas se pueden procesar de manera diferente, lo que da como resultado diferentes colores y sabores. Por ejemplo, el té negro se elabora con las mismas hojas que el té verde, pero las hojas se oxidan, lo que da como resultado un color más oscuro y un sabor más fuerte. El té oolong también se elabora con las mismas hojas, pero está parcialmente oxidado, lo que da como resultado un sabor y color únicos. Entonces, si bien el té verde es el tipo de té más común, no es el único tipo de té disponible